Líneas rojas

  
Se pasea el alma sin vida,
engañando a todos;
camina y va dejando solo destrucción a su paso.
Sigue sin voluntad…;
lo único que consigue es más tristeza a su haber.
El dueño, moribundo,
está atrapado por su existencia miserable;
adorna su cuerpo con líneas rojas.
Cada corte,
un millón de lágrimas que se pierden en el olvido
y olvida por instantes
quién es realmente.
No lo conoces,
nunca lo harás;
solo debes guardar silencio
cuando lo veas sangrar…
  
Morgan Le Sorcier. 17-10-08